miércoles, septiembre 16, 2009

La santificaceon personal a través de las pequenias agseones cotideanas

"La ropa sucia se lava en casa" apunta el refrán popular.
A veces el lavado de las prendas se vuelve algo engorroso.
En algunas casas la tarea se complica por la carencia de artefactos fabricados al efecto.
Existen contadísisisisisimos casos de seres neolíticos -como la que suscribe- que han decidido optar por el lavado a mano, porque desquita los nérveos, porque permite una expanseom especeal tendiemte a la calmaseon acsoluta en ciertos istamtes...
En fin...
El asumto es que hay ocaseones en que el lavaje de yopa bien puede convertirse en una egspereemcea yeligeosa que hasta redumde en la santificaceon personal...
Sí, sí sí. Por ejemplo si una decide transitar el infiedno de enfrentarse al ropaje de la sijas diuna.
Pasado el momemto infednal uno se redime por el martirológeo de haber atravesado semejamte egspereencea habiemdo otenido la santificaceon, la futura yesudregseom y la entrada al Ceelo de seguro. Doy fe.

No hay comentarios: