Ser una güena vecina tiene lo susho...

Ser una güena vecina tiene lo susho...
Una se expone a situaciones inimaginables...
"Un suponer", diría mi amiga Leo...
Se le ocurre a la vecina, de un día para otro, levantar el paredón de la medianera, para lo cual debe podar la arboleda que plantaran sus antecesores y emprender la tarea titánica de desencajar las ramas ramitas y ramotas que se han ido entretejiendo a través del cerco metálico que separaba nuestros fondos... ¡Qué leeeeeeendoooooo! diría Carlitos Balá...
Muy atinada me avisó que "ese día" mantuviera a "mis perritos" adentro (Nahuel es un siberiano gordote y pesado, amén de desobediente al mango, Homero es un pointer que no puede estarse quieto un segundo y Arenella es una perrita cruza de cocker que ladra desaforadamente... je je, andá haciéndote un esbozo del panorama...)
Buena vecina, me la banqué... ¡Qué iba a hacer!... En fin... medio lento me parecía el trabajo...
En un momento me sobresaltó un ladrido en mi ventana... Apolo, el canino vecino, un perrito de policía con un vozarroncito así, ¿cómo diría? Un poquitín molesto ¿no?
Así trancurrieron los días... Sí, días... Porque llevamos una semana ya de tener los fondos compartidos y mientras mis obedientes cuadrúpedos se mantienen adentro, el Apolo y la perra madre que lo trajo al mundo, se pasea por mis basurajes (No diré que mi fondo es una maravilla de orden, convengamos...)
Hoy llego de comprar la verdura y un extraño aroma perturba mis fosas nasales...
Ahá!!!!!!!!!!!! Una montaña generosa de materia orgánica en medio del baño (Mis perros no son desubicados, dentro de todo...)
¡¡¡¡¡¡¡¡¡ Pero será de Dios!!!!!!!!!!! ¡Qué ganas de levantar la montaña y enchufársela a mi vecina, en medio de epítetos de esos que se profieren desde lo más recóndito...!
Mamma mia... Levanté el montón. Entre paréntesis ¿Conocés algún producto que sirva para destapar inodoros?
Y aquí estoy, compartiendo mi avatar de hoy....
Lo que sí aprendí...
Güena vecina... ¡Minga!